¿Qué sucede cuando una incomodidad se vuelve cotidiana? En el caso de Damián, la convirtió en una oportunidad que, finalmente, lo llevó al éxito. Conocé su historia en esta nota.

Damián Ramonda, oriundo de María Susana, Santa Fe, tiene 40 años y es padre de 3 hijos. Viene de familia de comerciantes, su mamá tiene un negocio de artículos de juguetería y bazar, y su papá tiene una casa de artículos del hogar. Damián es Técnico Electrónico y desde siempre trabajó ayudando a su padre en el local, reparando partes electrónicas. Hasta que un día le resultó imperioso hacerle caso a su deseo: “Sentí que quería hacer otra cosa de mi vida”.

Pero concretar un deseo no tiene por qué ser una cosa sencilla y, como dice la canción se hace camino al andar, a veces sabemos lo que queremos cuando nos animamos a hacer, a probar, a intentar y a equivocarnos. Ciertamente otro condimento para poder llevar a cabo un deseo, en este caso “hacer otra cosa de la vida”, es el apoyo de nuestro círculo. Damián habló con su papá y éste, sin dudarlo, estuvo a su lado para que emprendiera el viaje que le cambiaría la vida.

De esta manera, se fue a trabajar a un campo que era de su familia, luego alquiló otro en Córdoba, y allí comenzó su vida como productor agropecuario; vida, por cierto, para nada sencilla. Pero ¿cuál fue la incomodidad cotidiana que lo impulsó a forjar su camino?

“Los campos estaban lejos, entonces yo tenía que hacer 80 km. con el tractor, todos los días ir y volver, porque la máquina me la prestaba un amigo. Hasta que un día dije: “Hay que hacer una máquina para ir al campo, sacar 1, 2, 3, 10 camiones y volver a tu casa con la máquina”, recuerda Damián, fundador y actual presidente de la compañía de maquinaria agrícola, Tecsar.

Fue en el año 2013 que desarrolló una Extractora Autónoma y dejó la actividad agropecuaria para dedicarse a la industrial.

“Tecsar nace de una necesidad propia, de ser productor agropecuario, tener campos lejos y querer mejorar la logística”. Casi como si su destino hubiese estado marcado, Damián supo verlo al convertir una falencia en una oportunidad.

“La idea principal era hacerla para mí, no era para vender. Pero cuando empecé a ver que la máquina tenía muy buen mercado y que no existía una que sea así, la empecé a desarrollar en 2013 y a fines del 2014 tenía la tenía lista”, rememora Damián. Y como todo buen empresario, sabía que, si bien había creado la máquina, había muchos aspectos a su alrededor que, para resolverlos, tenía que asesorarse y formar equipo: “No sabía cómo venderla ni cuánto valía. Entonces llamé a unos amigos industriales y me dieron data para rumbearme un poco en cómo empezar en vender mi producto. Ahí empecé y una vez que lo tenía, no sabía qué nombre ponerle, cómo pintarlo, entonces contraté a una agencia de marketing y publicidad y de ahí salió Tecsar: Tecnología y Saber Argentina”.

Los comienzos de la comercialización de la máquina de Damián fueron muy a pulmón. Facebook fue su primer aliado y allí se contactó con su primer cliente, el primero en comprarle su creación.

“Hoy yo estoy muy agradecido de todo lo que creamos y de lo que hicimos. Ya tenemos una planta fabril muy grande para el muy poco tiempo -8 años- que estamos trabajando. Tenemos torno de CNC, una plegadora de 6 mts., corte pantógrafo, estamos por adquirir un láser y una cabina de pintura. Hemos crecido mucho, tenemos un personal muy capacitado. Y bueno, esas son las satisfacciones que uno tiene con respecto a toda la trayectoria del tiempo que estamos trabajando”.

Tecsar viajó a Sudáfrica

Este año se realizó la prestigiosa feria agropecuaria NAMPO en Bothaville, Sudáfrica, de la cual, Expoagro es aliado estratégico.

Allí viajó Damián, representando a Tecsar y formando parte de la comitiva argentina que participó de la feria.

“Hace tiempo que estamos abocados a vender en el exterior. Estuvimos en Sudáfrica, en Australia, en Uruguay y hace 2 semanas atrás estuve en Brasil, en donde tenemos una perspectiva muy buena de negocio. Estamos enfocados en ampliar los horizontes”.

Presente y desafíos

Actualmente, debido al crecimiento de su empresa y gracias al respaldo de su equipo, Damián es responsable del sector de Comercio Exterior de Tecsar.

Si bien la Extractora Autónoma es la estrella de esta historia, la compañía supo desarrollar otros productos, como embolsadoras, tolvas autodescargables, bateacargadoras y enrolladores de bolsa. “Fabricamos hace muy poco un plantador de mangas de riego para los riegos artificiales por inundación”, agregó Damián.

El crecimiento de cualquier emprendimiento trae aparejados desafíos y Tecsar no se encuentra aislada de esta realidad. Damián sabe que el país atraviesa una situación compleja, tanto económica como climática, pero aun así sentencia: “Los desafíos hay que afrontarlos y saber que siempre están. Son las reglas del juego que nos toca jugar”.

Ficha técnica

Antes de cerrar esta nota, queremos presentarles la Extractora Autónoma con motor que creó Damián y por la cual nació Tecsar: la EHM 370.

Su principal característica es su autonomía, tiene su propio motor, no necesita tractor y se puede trasladar al campo en una camioneta.

Posee bajo consumo de combustible y al ser 100% hidráulica no hay desgaste entre metales como otras máquinas mecánicas. Además, al tener el tubo entero en 4 mm. de espesor, el flujo de cereales es parejo y evita roturas.

Es muy práctica y sencilla, con una sola posición de trabajo. Al ser angosta se ocupa mejor el espacio, lo que permite el armado de silobolsas uno al lado del otro.

Por Antonela Schiantarelli

En caso de replicar este contenido en su totalidad o parcialmente, por favor citar como fuente a www.expoagro.com.ar en el primer párrafo y al final de la nota.

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