La mayoría de los cultivos están teniendo un buen desarrollo, pero dependen de las lluvias para lograr su máximo potencial. En el caso de los trigos, sufrieron los efectos de una helada tardía el 12 de octubre, sin embargo, los rindes estuvieron cerca de los promedios históricos.

La semana previa a la Navidad, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) advirtió por muchos lotes con pérdidas de cultivos por inundaciones en la zona núcleo, y luego la Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) sumó su señal de alerta al afirmar que el 30% de los lotes del cereal tiene un fuerte retraso en la cosecha y eso podría incidir en pérdidas tanto de rinde como de calidad.

En la región de Venado Tuerto, corazón productivo de la zona núcleo, el Ing. Agr. asesor y administrador de campos, Luis Pozzi, apuntó que “cerramos el año con poco más de 700 mm, cuando el promedio histórico ronda los 900 mm, y en 2022 cerramos en 520 mm”.

En esta línea hizo una descripción positiva sobre la situación actual de los cultivos, pero aclaró que “cuando pasen 20 días sin llover, los cultivos van a sentir nuevamente la falta de lluvia. Venimos de tres años secos con entre 200 y 300mm menos por año y las reservas son escasas, no hay más influencia de las napas, dependemos 100% de las lluvias, aunque todo indicaría que se van a ir dando”.

Trigos en la zona

En el detalle de cómo están avanzando cada uno de los cultivos Pozzi puntualizó: “Los trigos se pudieron implantar bien, en fecha, y estuvieron con niveles de agua adecuados, porque si bien les pudo haber faltado en algún momento, las lluvias llegaron a tiempo”.

El inconveniente climático que se sumó este año fue una helada tardía el 12 de octubre, con -1 grado que duró entre cuatro y cinco horas, y según la variedad y el estado fenológico afectó más o menos a los cultivos. Los más golpeados fueron los que estaban en floración o antesis.

En cuanto a rindes el asesor comentó que “hicimos un promedio de 40 quintales, muy por encima del año pasado que había sido catastrófico, y estuvimos un 10% por debajo del promedio de los últimos cinco a siete años”.

La cosecha se pudo realizar en término, sin inconvenientes por la lluvia, con muy buena calidad.

Soja de segunda

Las complicaciones llegaron para la siembra de la soja de segunda, porque estaba muy seco y luego llovieron 120 mm en una semana y ahora se está terminando la implantación, con 20 días de atraso en algunos casos.

En lo que se refiere a los maíces, se pudieron sembrar en fecha gracias a una lluvia de entre 50 y 80 mm en los primeros días de septiembre: “Los maíces tempranos se sembraron en fecha, y con buena condición de humedad, pero de ahí en adelante el agua fue escasa, y en la segunda quincena de noviembre sufrieron un poco los cultivos, pero en la primera semana de diciembre comenzaron las lluvias importantes que acumularon 120 mm; ahí recuperaron estado y están en muy buena condición, llenando granos, y muy buen nivel de agua en el suelo”, precisó el asesor.

Para Pozzi estos maíces “tienen un 70 a 80% de rendimiento asegurado, y sólo les faltaría durante enero 50 a 80mm para completar el llenado de granos”.

En soja de primera se demoró cerca de una semana la siembra, pero estimó que entre fines de octubre y la primera quincena de noviembre se terminó de implantar, “con muy buenas condiciones, porque casi no les ha faltado el agua, y están en pleno desarrollo vegetativo”.

Para resumir todo el cuadro de situación, el asesor y administrador del establecimiento Zum Zum (entre Venado Tuerto y Murphy perteneciente a la familia Filipetti) comentó: “La cosecha de trigo fue de regular a buena, y muy buena en algunos casos. El maíz está muy bien encaminado en el caso de los tempranos, y los tardíos todavía tienen mayor definición por delante, pero en la zona se hizo mayormente temprano. Y en soja viene muy bien la de primera y tenemos un atraso en la de segunda, que todavía se está sembrando”.

Campaña más cerca de los promedios

El Ing. Agr. Carlos Covernton es asesor de distintos campos en las zonas de Santa Isabel, Teodelina (Santa Fe), General Arenales (Buenos Aires) y Arias (Córdoba).

Carlos Covernton

En lugar de las lluvias, por momentos esquivas y en otros intensas, los productores se vieron afectados por la helada tardía del 12 de octubre.

“En Santa Isabel, como en Venado Tuerto, no nos pegó tanto la helada, pero en la zona de Teodelina y General Arenales los rindes bajaron muchísimo. La variedad más afectada fue la Baguette 620, mientras que el resto se defendió un poco mejor, pero todas tuvieron afectación por la helada y yendo más al sur fue mayor el daño”, describió Covernton

Por otra parte, el profesional comentó que no tuvieron problemas para cosechar por la lluvia, y reconoció que las precipitaciones de Navidad fueron buenas en la zona de Arenales, menores en Santa Isabel, en tanto que en la región de Arias cayeron 18 mm que se sumaron a los 100 a 120 mm de la semana anterior: “Los suelos se vienen recuperando bien, pero no sobra nada, y antes de la lluvia grande del 20 de diciembre veníamos con lo justo, y ahora si no llueve en los próximos 10 a 15 días vamos a estar apretados de nuevo”.

Sin embargo reconoció que en el caso del maíz ya se encuentra en floración con buenas condiciones de humedad y favorecido, porque las temperaturas no fueron tan altas, mientras que las sojas de primera recién están en su etapa inicial y las de segunda todavía se están sembrando.

Por otra parte, comparando la actual campaña con la pasada, recordó que “en esta época recién estábamos sembrando el maíz, con una campaña para el olvido en la que se cosecharon 5 o 6 qq de trigo y haciendo soja también muy tardía. Este año se está pudiendo hacer todo en tiempo y forma, salvo el caso de la soja de segunda”.

El ingeniero agrónomo también ofreció un detalle de los rindes históricos para los distintos cultivos en las zonas de Santa Isabel, General Arenales y Arias: en soja de primera los promedios rondan entre 45 y 55 qq, los maíces entre 110 y 135, los trigos entre 40 y 60, y la soja de segunda entre 30 y 40 qq.

El año pasado el trigo no llegó a los 7 qq en promedio, soja de primera 28, maíz 95 y soja de segunda 20 qq, y este año se espera estar más cerca de los promedios históricos en todos los cultivos.

Por Pablo Salinas

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