En los pagos de la “Sole”, además de revolear el poncho crían pollos agroecológicos
El año pasado el emprendimiento “Granja Areco” accedió a un premio de 3,5 millones de pesos otorgado por la Red Argentina de Municipios y Comunas frente al Cambio Climático. Con ese dinero ampliaron las instalaciones, plantaron un bosque frutal y comenzarán a brindar cursos y talleres sobre agroecología.
Un lugar común es pensar en Arequito y asociarlo, indefectiblemente, con Soledad Pastorutti, y su revoleo de ponchos. Pero esta localidad del Departamento Caseros, en la provincia de Santa Fe, “Capital Nacional de la Soja”, también es cuna de “Granja Areco”, un proyecto agroecológico premiado el año pasado por su actividad amigable con el ambiente.
Durante la segunda mitad de 2023 continuó la implementación de Proyectos Piloto de Reconversión Productiva Sostenible de la Red Argentina de Municipios y Comunas frente al Cambio Climático (RAMCC), donde uno de los premiados fue el emprendimiento avícola arequitense.
El premio son aportes no reembolsables provenientes de la Unión Europea que, a través de este programa, apuesta a fomentar actividades que puedan ser parte del camino para bajar el impacto ambiental de las economías locales.
“Granja Areco”
La historia de “Granja Areco” se inicia en 2018 con una producción de huerta agroecológica, que luego se transformó en emprendimiento avícola cuando los impulsores del proyecto, Nicolás Bureu y Nicolás Martino, accedieron en 2020 a un terreno periurbano de 2,5 hectáreas.
“En 2020 incorporamos las gallinas ponedoras, que siempre tuvimos en mente hacerlo, pero no nos daban esa posibilidad las características del terreno anterior. Lo último que incorporamos, hace un año y medio, son los pollos parrilleros”, detalló Martino.
La producción de las gallinas se realiza a pastura libre de jaula, “son parcelas en las que tenemos un gallinero fijo, pero vamos moviendo las gallinas de parcela mensualmente y el gallinero sólo lo utilizan para dormir y poner huevos”, explicó el productor y precisó que la misma metodología de trabajo utilizan para los pollos doble pechuga.
Por el método de crianza empleado, en el emprendimiento no se aplican antibióticos ni químicos en la dieta, dado que los animales no se estresan. El resultado son aves con una carne sin grasa, 100% magra, y huevos de gran calidad. Los distintos productos de la granja se comercializan en Arequito, la zona y en la ciudad de Rosario.
Concurso de la RAMCC
Para sumarse al programa de la RAMCC uno de los requisitos es que los participantes trabajen en conjunto con los estados comunales o municipales. En este caso, la Comuna de Arequito está adherida al programa Empleos Verdes Locales de la Red, a partir de lo cual Granja Areco pudo sumarse a la propuesta gracias a la alianza de trabajo con la administración comunal.
Entre los méritos de este proyecto avícola para acceder al premio, se destacan el hecho de tratarse de una producción sustentable, sin uso de químicos ni maltrato animal, “también está el impacto social del proyecto, porque una de las propuestas dentro del emprendimiento es, en un futuro, poder abrir la granja para cursos o talleres, y que la granja pueda ser utilizada como una especie de escuela para estimular a otros productores y demostrar la importancia de la producción sustentable por su impacto ambiental”, ponderó Martino.
En palabras de la RAMCC “el emprendimiento Granja Areco se dedica a la producción de alimentos agroecológicos promoviendo un consumo saludable y fomentando el cuidado del medioambiente y el bienestar social”.
Premio monetario
Un importante incentivo para sumarse a la propuesta de la RAMCC es el premio en metálico que ofrece: 3,5 millones de pesos surgidos de fondos aportados por la Unión Europea.
En “Granja Areco” ya le dieron destino al premio: “Con el dinero que recibimos pudimos agrandar las instalaciones, realizamos todo el tendido de aguadas y colocamos un tanque en elevación para los bebederos automáticos de los animales, y para hacer el riego de la pastura natural y la alfalfa que sembramos, cosa de tener siempre pastura fresca para las gallinas”, describió Martino.
Otra parte la utilizaron para la construcción de un salón donde se impartirán los cursos y talleres, y además fabricaron dos gallineros móviles.
En la actualidad cuentan en la granja con 350 gallinas, pero el proyecto es llegar a mil, para lo cual “ya estamos comprando pollitos de la raza INTA, que para nosotros es la que más nos sirvió. De a poco nos vamos agrandando, trayendo tandas de a cien pollitos, que nosotros las criamos hasta su edad adulta”.
Otra de las metas de los productores es comenzar a generar pollos propios, para lo cual tienen proyectado destinar un espacio apartado, con un gallo y 10 a 15 gallinas (todos de la raza INTA), donde se irán rotando las gallinas cada dos o tres días. Los huevos conseguidos se colocarán en otro gallinero aislado donde un grupo de gallinas cluecas darán terminación al ciclo.
De esta forma buscarán contar con producción propia de pollos, dado que uno de los efectos del brote de Gripe Aviar del año pasado fue la imposibilidad de comprar pollitos para ampliar el emprendimiento.
Otra importante inversión realizada por Bureu y Martino con el premio de la RAMCC fue la plantación de 50 árboles frutales, incorporando al emprendimiento distintas variedades de naranjas, limones, mandarinas y pomelos.
Por Pablo Salinas
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