Llevar adelante una familia, un emprendimiento personal y una cabaña

Llevar adelante una familia, un emprendimiento personal y una cabaña

En tiempos donde el multitasking pareciera ser la única forma de vivir, Florencia Goitia se mueve entre una actividad y la otra con naturalidad, precisión y disfrute. Conocé la historia de esta mujer que lleva adelante más que un trabajo.

Hace muchos años el padre de Florencia compró el primer campo en la provincia de Corrientes y con el tiempo fue ampliando el negocio. Una familia tipo, donde quizás se esperaba que los hijos se involucraran en la actividad pero que tampoco era una obligación.

Entre ese horizonte marcado y la libertad, creció Florencia que decidió montar un salón de juegos para chicos en el que trabaja hasta el día de hoy. Actualmente, casada y con 2 hijas, también lleva adelante las cabañas de la familia. Finalmente sucedió.

Como se dan las mejores cosas, Florencia se involucró sin pensarlo demasiado, luego de conocer a su marido.

Una de las cabañas, Rincón del Oratorio, se dedica a la raza Brangus; mientras que la otra cabaña, El Estribo, trabaja la raza Braford. Entre ambos establecimientos tienen 35.000 animales.

“Nuestra oficina es chica, somos 10 personas en total y tenemos mucha gente en el campo trabajando. Yo trabajo con mi marido, él hace toda la parte de producción y yo hago la parte de administración. Mientras que mi suegro hace la parte de ventas”, explica Florencia, haciendo hincapié en el carácter familiar del negocio.

Cuando comenzó su tarea administrativa se puso un primer objetivo: “Que la oficina entienda los tiempos del campo y que el campo entienda los tiempos de la oficina. Y la verdad es que llegamos a eso”. Ya que, estando allí se dio cuenta que era muy difícil hacer que la oficina comprendiera al campo y viceversa. “En la oficina, como es todo administrativo, es muy difícil cuando te llaman y te dicen que ya necesitan alimento y la oficina dice ´no, dentro de 10 días, porque entra el pago´. No, bueno, no se puede porque son animales. Y vos ahí tenés que ser el nexo. Y ahí hacemos eso. Mi idea siempre fue unir eso”, resalta orgullosa del objetivo cumplido.

Otro de los desafíos que enfrenta Florencia tiene que ver con una visión de negocio que tienen en sus cabañas: avanzar en la genética. “Tenemos una parte comercial, de rodeo general y otra parte de cabaña. Lo que se refiere a cabaña, nuestro desafío es superarnos a nosotros mismos. O sea, este es el objetivo del año, el año que viene será otro. Y por eso venimos a las pistas. No solo para competir, sino también para saber cómo están los otros y cómo estamos nosotros en eso”, explica, haciendo referencia al último Mundial Brangus realizado en la provincia de Corrientes, en abril pasado, donde llevaron animales para competición.

En ese sentido, el año pasado sacaron un Gran Campeón Hembra de Palermo, raza Braford. “El jurado es el que te marca si tenés o no buena genética”, concluye.

Florencia sabe, por la experiencia misma, que las empresas necesitan trazar objetivos y mejor definirlos con tiempo: “Nosotros sabemos que, por ejemplo, para el año que viene tenemos que tener tantos embriones, hacer tantas transferencias, vamos a gastar tanto dinero, en genética vamos a invertir tanto, en sanidad vamos a invertir tanto”, para tener una previsibilidad.

Los dos objetivos de este año, teniendo en cuenta la coyuntura económica, es mantenerse y no caer, dice Florencia; y duplicar la cantidad de embriones que hicieron, más de 300.

Y ahora, la maternidad

Mientras hablamos con ella, sus hijas pequeñas toman un jugo y juegan al lado nuestro. Florencia y sus hijas se ven tranquilas, forman parte de esa comunidad, es su vida.

Ellas van conmigo a todos lados, saben que esto es nuestro. Y como nosotros no tenemos gerente ni nada, o sea, somos nosotros, saben que a veces cuando hay eventos, por ejemplo, quizás tengan que faltar a la escuela”, explica.

Y además resalta el rol de las mujeres en nuestra sociedad y en el campo: “La mujer es parte de todo. En nuestra oficina trabajan varias mujeres, en contaduría, en construcción, en compras”.

Cuando estamos por cerrar la nota y le preguntamos si hay algo que desee decir que no le hayamos preguntado, dice que sí: “Hay que seguir para adelante. Eso es lo importante en esto. En esto y en la vida personal de cada uno. Se puede con ganas; todo lo que te guste, con ganas, se puede. Funciona”.

Por Antonela Schiantarelli

En caso de replicar este contenido en su totalidad o parcialmente, por favor citar como fuente a www.expoagro.com.ar en el primer párrafo y al final de la nota.

Compartir