No es verso, en Sarasa, tomar un vermut es toda una «experiencia»

No es verso, en Sarasa, tomar un vermut es toda una «experiencia»

En la pequeña localidad bonaerense, los bartenders baten sus cocteleras en un entorno natural.

La localidad de Sarasa se encuentra a 25,6 km. al suroeste de la ciudad de Colón, provincia de Buenos Aires. Para llegar debemos abandonar la nacional 8 y tomar el asfalto de la provincial 50 y a los pocos kilómetros desviarnos a la derecha, tomando un camino de tierra que nos impregna de su historia. Los ocres del horizonte nos sirven de brújula para acceder al lugar. 

En un marco campero y natural, en medio de la llanura pampeana, un grupo de bartenders de diferentes localidades eligió este lugar para mostrar sus recetas, preparar vermut y compartir sus conocimientos de coctelería con la comunidad.

La experiencia tiene como fin recorrer la Argentina reivindicando una de sus costumbres más arraigadas: la experiencia de los aperitivos que los inmigrantes italianos y españoles trajeron a principios del siglo XX y que aún hoy se mantiene vigente. 

La hora del vermut remite a infancias lejanas en el campo, cuando los grandes se reunían bajo los eucaliptos y los paraísos. Como fondo, la pampa sin límites y el cielo incendiado de los atardeceres, o el ardiente sol del mediodía, bajo la sombra de los árboles o en la fresca galería. Tomaban vermú y sus mezclas, con mortadela, chacinados criollos y caseros, quesos. Los chicos, soda de sifón con una gotita de vermú con Granadina. Todos estos aromas se mezclan en los recuerdos.

Apoyado en la barra del Club Plus Ultra, y deleitándonos con un incipiente trago, Matias Jurisich, uno de los principales promotores de la iniciativa, se define como «cantinero, fotógrafo amateur y productor de bebidas artesanales. Pero sobre todo, curioso». 

Él explica: «La Experiencia Vermut inició en 2012 y elegí Sarasa porque es el lugar de mi niñez. Desde que nací y hasta los 13 años viví en la localidad. Para mí, Sarasa es mi punto de partida, mi visión inicial del mundo. No se puede avanzar hacia el futuro si no se sabe de dónde se viene. Eso es Sarasa para mí, mi pilar para crecer».

Matías cuenta que «el objetivo del encuentro es llevar varios bartenders de diferentes puntos del país a crear tragos en el medio del campo sobre la base de vermut y que luego son rematados para donar el dinero recaudado a instituciones del lugar».

Mientras seguimos el ritmo de las cocteleras, Matías define a Sarasa con una bebida: «Si tuviera que pensar un sabor, Sarasa es un Ferroviario, vermut rosso con fernet y soda. Porque no solo se servía en el Club Plus Ultra de la localidad, sino también porque cuando estaban las vías férreas, la zona tenía un potencial enorme. La famosa Colonia Carlos Pellegrini».

Nos despedimos y vamos dejando atrás el paisaje acogedor de Sarasa, donde conocimos nuevos horizontes de la coctelería buceando en el interior mismo de sus raíces, su gente y sus modos de vivir.

En caso de replicar este contenido en su totalidad o parcialmente, por favor citar como fuente a www.expoagro.com.ar en el primer párrafo y al final de la nota.

Compartir